I. Experiencia de Vida

En días recientes estuve conviviendo con mi hermano y mi cuñada, 2 ejemplos de vida cristiana para mi.

Mucho de mi deseo de estar en un movimiento religioso durante mi juventud fue por el ejemplo de mi hermano, por su convicción y capacidad para mostrar ese camino como bueno, correcto y agradable.

En los últimos 8 años, mi cuñada es (sin que Ella lo sepa), una directora espiritual, una fuente de conocimiento e inspiración, no es fácil seguirle el paso, siempre está exigiendo que leamos, que recemos, que nos esforcemos más, Ella me hace recordar la frase de Francisco: “Nunca bastante”

Ayer hablé con mi Mamá y pude sentir su amor, su guía, su comprensión, su bendición, y preocupación. Un faro de luz, de amor y de cristianismo que ha tatuado mi vida para Él, en muchas ocasiones siento que mi Mama hizo conmigo lo que Ana hizo con Samuel.  

Finalmente el día de ayer pude tener una conversación de unos minutos con mi compadre, y modelo de vida, pudimos compartir nuestra pasión por el Evangelio y sentí como si un abrazo de Dios me fuera regalado en sus palabras

Podría contar muchos más ejemplos, gracias a Dios, de personas que me ayudan y me dirigen hacia Dios, pueden ser rudas y exigentes, conocedoras y sabias, cariñosas y espirituales, humorísticas y sentimentales, todas ellas son pistas de Dios para que nos encontremos con Él, son las voces de Eli, de Juan, de Andres, llamándonos a seguir al Cordero de Dios, al Mesías, al dueño de nuestra vida. 

II. Mensaje

En muchas ocasiones estamos buscando escuchar la voz de Dios, más Dios no se presenta como en el caso que leeremos hoy de Samuel o de Andres o Juan de forma directa, ¿Dónde buscar escuchar la voz de Dios?

El Catecismo de la Iglesia Católica en sus números 2685 al 2690 nos da 6 pistas de donde escuchar a Dios:

1. En la familia cristiana. 
2. En los Sacerdotes
3. Monjes, Eremitas, monjes y monjas
4. La catequesis 
5. Grupos de oración, o “escuelas de oración”, 
6. Dirección espiritual.
   1. Según el consejo de san Juan de la Cruz, 
      1. “Mirar en cuyas manos se pone, porque cual fuere el maestro tal será el discípulo, y cual el padre, tal el hijo”.
      2. “Además de ser sabio y discreto, ha de ser experimentado. Si  no hay experiencia de lo que es puro y verdadero espíritu, no atinara a encaminar el alma en él, cuando Dios se lo da, ni aun lo entenderá” 

III. Lectura de la Palabra, Reflexión y Explicación

En la primera Lectura 1 tomada del I libro de Samuel, en esta lectura veremos el llamado del profeta Samuel, y Elí, su mentor, su director espiritual ayudándolo a discernir la voz de Dios. 

• Es importante mencionar que estamos leyendo el 3er capítulo del libro de Samuel previamente pasaron 2 cosas MUY importantes
  1. Leemos en el primer capítulo de Samuel que su Madre, Ana consagra a Samuel a Dios
  2. Leemos en el segundo capítulo que Elí el profeta no está siendo el mejor educador de sus hijos
• Trascendental entender eso para saber porque Dios elige a Samuel en detrimento de Eli. 
• Hoy quiero resaltar 2 acciones de Samuel, para nuestra vida práctica:
  1. Escuchar el llamado de Dios”El Señor llamó a Samuel y éste respondió”
  2. Contestar el llamado de Dios, de forma inmediata “Fue corriendo”
• La dirección espiritual de Eli, para Samuel es básica, Elí se da cuenta de que Dios está buscando directamente a Samuel, y por eso sabiamente le dice que la llamdo de Dios conteste: “Habla, Señor; tu siervo escucha”
• En toda la Biblia, Dios habla a 7 personas por su nombre en 2 ocasiones, marcando que aquel llamado es para algo trascendental, uno de ellos, es Samuel:
  1. Abraham
  2. Jacob
  3. Moises
  4. Samuel
  5. Marta
  6. Simon/Pedro
  7. Saulo/Pablo

El Salmo de este domingo tomado del (Salmo 39 o 40), y de la primera estrofa quiero resaltar una metodología de oración, una metodología de encuentro con Dios:

1. Esperar en el Señor
2. Poner confianza en el Señor,
3. Esperar que Él se incline hacia mi
4. Contarle tus plegarias

Esto nos lleva  a la tercera estrofa:

5. Hacer su voluntad

Y, finalmente a la cuarta estrofa:

6. No cerrar los labios, anunciar la palabra de Dios

En nuestra segunda lectura, San Pablo nos habla de un tema que históricamente se la ha criticado a la Iglesia Católica, y es sobre la libertad o libertinaje del tema sexual.

Es un tema que nos podría llevar hora explicar y discutir, lo voy a resumir en unas cuantas líneas.

• Dice el texto de hoy: “El cuerpo no es para fornicar”, en otra traducción dice: “el cuerpo no está hecho para la lujuria, sino para el Señor” 
  • ¿Qué es fornicar? Según la RAE: cópula carnal fuera del matrimonio.
  • ¿Por qué es malo fornicar? Porque Dios le quiso dar un valor a la sexualidad tan elevado que lo reservo para el matrimonio, es decir ya no es solo el encuentro de una mujer y un hombre, sino la intimidad en el matrimonio, del cual Él forma parte.
  • Decimos en filosofía, que existe el fin último de las cosas, en el caso de la sexualidad humana, su fin último no es únicamente la satisfacción sexual, sino la unidad de la pareja, la procreación, y  como dice San Pablo: “La Glorificación a Dios con el cuerpo”
• El plan de Dios es perfecto, no significa que sea fácil de seguir o fácil de entender, más el primer paso es el reconocer que no somos nuestros propios dueños, ya lo comentamos la semana pasada, por eso San Pablo dice con claridad: “”No son ustedes sus propios dueños”
• San Irineo, bellamente dice: “La gloria de Dios consiste en que el hombre viva”, es decir los Cristianos no somos puristas que rechazamos los placeres de esta vida, al contrario, estamos llamados en vivir los placeres de esta vida en su máxima plenitud, en su máxima expresión, y en ello Glorificar a Dios. No cometamos el pecado de Esau, profanando lo divino por algo humano.

En el Evangelio de este domingo, el Evangelista Juan, nos narra 2 momentos, no solo de forma cronológica, sino 2 momentos de todo Cristiano debe vivir, pasar de ver a Cristo como Rabí o Maestro a verlo como Mesías o Ungido. 

• Inicia el evangelio con un Juan, como reflejo de Eli de la primera lectura, siendo el director espiritual, de 2 discípulos, que en el segundo momento serán directores espirituales de sus hermanos. 
• Juan declara que Jesús es el Chivo expiatorio, cambiemos la frase Cordero de Dios, por Chivo expiatorio de Dios.
  • René Girard, escribe al respecto de forma hermosa:
    • “Los Evangelios revelan constantemente lo que el texto de los perseguidores históricos, y especialmente de los fiscales mitológicos, nos oculta: el conocimiento de que su víctima es un chivo expiatorio…
    • La expresión chivo expiatorio no se usa en realidad, pero los Evangelios tienen un sustituto perfecto en el Cordero de Dios. Como «chivo expiatorio«, esto implica la sustitución de una víctima por todas las demás, pero reemplaza todas las connotaciones desagradables y repugnantes del macho cabrío por las positivas asociaciones del cordero. Indica más claramente la inocencia de esta víctima, la injusticia de la condena y la falta de causa del odio del que es objeto.” 

• Al escuchar los discípulos la frase de su maestro, lo dejan, ya no van a seguir al Maestro Juan, ahora seguirán al Cordero de Dios.
  • Aquí hay otro espejo de la primera lectura, Oír y seguir. Así como Samuel escuchó y corrió a contestar, en el Evangelio, Andres y Juan, escuchan que Cristo es el Cordero y siguen a Jesús. 
  • ¿Cuando Dios nos habla lo sigues o te haces el sordo?
• Jesús hace una pregunta no solo a Andrés y a Juan, si no a nosotros en la actualidad: ¿Qué buscas?
  • Podemos contestarle a Dios como al genio de la lámpara maravillosa, concédeme un deseo o como a un profeta: “dime que debo hacer o dime que va a pasar”, más la actitud de Andrés y de Juan es la correcta, si Jes´s es el Cordero de Dios, no quieren algo de Él, lo quieren todo de Él, por eso quieren vivir con Él.
  • Siempre me ha dado muchísima curiosidad porque Juan nos narra que eran las 4 PM, o la hora décima, y siempre pienso, que aquel día fue tan fuerte e impresionante para Juan que pasado el tiempo, sigue recordando la hora del encuentro, como un tatuaje que queda para siempre, una marca para el resto de su vida.
• Finalmente, Andrés, se vuelve el director espiritual de su hermano, Pedro, en los evangelios se nos cuenta muy poco de Andres, pero es trascendental entender su papel, sin su conversión y sin su dirección, no tendríamos a Pedro.
  • Andrés es muy astuto, no ocupa el lenguaje de Juan El Bautista, llamando a Jesús: Cordero. Andrés ocupa un lenguaje más propio para su hermano, “Hemos encontrado al redentor enviado por Dios para salvar a la humanidad. EL Mesías.”

IV. Oración

Padre Celestial, sé que me amas. Confío en que tienes un plan único y especial para mi vida que conducirá a mi santidad, mi felicidad y la salvación de las almas.

Enséñame cómo hablar contigo y escucharte, para que en el silencio de la oración puedas abrir mi corazón para conocer y seguir este plan.

Dame el coraje para decir “sí”, para decirte: “Habla Señor, tu siervo te escucha”.

Por favor, coloca personas santas en mi camino para ayudarme a conocerte, amarte y servirte, para que pueda convertirme en un testigo efectivo de Tu amor en el mundo.

Amen.

V. Compromiso

Reflexión: 

¿Dónde encuentro una guía espiritual?

¿A quién le pido guía espiritual?

¿Soy guía espiritual de alguien?

¿Escuchó y actuó de acuerdo a la voluntad de Dios?

¿Vivo mi vida consciente de que “No soy mi propio dueño”?

Acción: 

Buscar a un director espiritual

Si tienes el don del que habla el CIC en su número 2690, conduce a los demás mediante la dirección espiritual.