La época del gozo y la acción – I Domingo de Adviento

I. Experiencia de Vida

Estamos empezando el año calendario, el Ciclo B, iniciamos el Adviento.

En todos los deportes, existe una etapa de preparación, conocida como la pre-temporada, es la época del año cuando los deportistas vuelven de sus vacaciones y deben volver a fortalecerse, revisar su cuerpo, revisar los temas fundamentales del deporte, conocer a sus nuevos compañeros.

Cuando vamos a la playa, un par de semanas, o meses, dependiendo de la complexión física de cada uno, nos preparamos, tal vez con una dieta, o con ejercicio, o comprando un traje de baño nuevo.

Antes de una boda, y depende del caso de cada uno, preparamos por semanas, meses o hasta años, cada detalle, para que aquel día sea único.

Así que para nosotros esta época es de gozo porque sabemos que ya viene Jesús a nacer en nuestros corazones, y de acción, para preparar la casa y limpiarla, comprar los vestidos, limpiar el alma y hacer todo para que el invitado de honor se sienta cómodo y confortable.

II. Mensaje

Iniciamos el año litúrgico, y el tiempo de Adviento.

La Iglesia Católica organiza las lecturas bíblicas de la Misa que se utilizaran cada tres años:

  • En el año «A», la lectura principal (Evangelio) sigue el Evangelio de San Mateo;
  • En el año «B», el Evangelio de San Marcos;
  • En el año «C», el Evangelio de San Lucas.

Y el Evangelio de San Juan se reserva para ocasiones especiales, especialmente fiestas grandes y solemnidades, con énfasis en la Semana Santa.

Cada ciclo comienza con su año litúrgico, es decir, desde la primera semana de Adviento. Esto significa que, litúrgicamente, el ciclo 2021 comienza ya en 2020, el primer domingo de Adviento, que es hoy 29 de noviembre de 2020. No tenemos que esperar hasta el 1 de enero de 2021 para entrar en el ciclo B, ya que el punto de partida no se basa en el año calendario, sino, por supuesto, en el calendario litúrgico de la iglesia.

La llegada de Jesús debe promover en nosotros al menos 2 estados:

  • Gozo: Porque va a nacer Dios, porque su segunda venida está cada vez más cerca. No debemos de tener miedo, porque si Jesús dio su vida por nosotros en la cruz, es para traernos la verdadera paz y felicidad. Por eso decimos: VEN SEÑOR, NO TARDES.
  • Acción: El adviento, aún no es la fiesta, donde solo debemos de disfrutar; El Adviento es la época de preparación, Jesús nos lo dirá hoy en el Evangelio: estén preparados. La Iglesia nos marca durante el año litúrgico 2 momentos clave de preparación, Adviento y Cuaresma, con la intención de que en estas épocas reforcemos nuestra preparación ante la llegada de Dios. Esto involucra el cambiar el verbo del simple presente al presente continuo, el Cristiano está llamado a estarse preparando constantemente para la llegada de Dios nuestro Señor

III. Lectura de la Palabra, Reflexión y Explicación

En la primera lectura del profeta Isaías, está tomada de 2 capítulos consecutivos finales del profeta, el 63 y el 64.

En este texto el profeta está reclamando, increpando, cuestionando: ¿Por qué, Señor, nos has permitido alejarnos de tus mandamientos y endurecer nuestro corazón? Esta es una gran pregunta para iniciar el Adviento, veamos la forma en la que está escrita el texto, no es un reclamo a que Dios se aleje, sino es un cuestionamiento, de porque no nos «jalo al redil» y permitió que nos alejáramos de Él. Eso dice de mí que ya entre en un proceso de hacer un examen de conciencia y un propósito de enmienda. Es decir no solo me quedo reflexionando en mi mal sino que una vez que lo reconozco: «Dios sale al encuentro del que practica alegremente la justicia y no pierde de vista los mandamientos»

Al igual que el Padre Misericordioso, en la parábola del Hijo Pródigo, el Señor nos espera, más en el instante que nos ve acercarnos, corre a nuestro encuentro.

El adviento es el tiempo de caminar hacia los brazos de Dios.

El Salmo de este domingo, tomado del Salmo 79 (u 80) nos pone en tono de humildad, en tono de aceptación, es decir, reconocer que por nuestras propias fuerzas no podemos salvarnos, que la salvación la obtenemos por el favor de Dios, y por eso le pedimos: «manifiéstate, despierta tu poder y ven a salvarnos»

Empezamos a leer la carta de San Pablo a los Corintios, en ella San Pablo no está narrando como logramos la santidad en el encuentro con Cristo, es decir, somos Santos, porque somos de Cristo.

Dios es quien los ha llamado a la unión con su Hijo Jesucristo, y Dios es fiel

Al igual que en nuestra oración colecta, entendemos que estamos invitados a un encuentro donde Dios viene a nosotros, una vez que nosotros salimos a buscarle, como dice el Apocalipsis 3, 20: Yo estoy a la puerta y llamo; si alguien oye Mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo.

Como mencione previamente, iniciamos un nuevo año litúrgico, el Ciclo B y con ello empezamos a leer a Marcos (versus Mateo del Ciclo A).

  • Si buscamos cualquiera de las definiciones de velar, encontraremos que involucran esperar, cuidar, poner atención a OTRO, es decir en el adviento velaremos por la espera de Jesús, no de nuestros regalos, de nuestras vacaciones, de nuestros deseos, nuestros aguinaldos, sino esperamos a Jesús, y ¿Qué esperamos de Él? Todo, el no viene a dar un poco, o bastante, Él viene a darlo todo, por eso nosotros debemos de vaciarnos de todo lo que no sea Él.
  • La segunda cosa que nos pide Jesús es estar preparados, ¿Se prepara igual el que va a correr 5 kms que el que corre 10 kms? ¿Se prepara igual el jugador de fútbol que el de béisbol? ¿Se prepara igual una sopa que un caldo? Sabemos que no. Entonces el primer paso es saber que es lo que estamos esperando, para saber como nos debemos de preparar. Nos estamos preparando para el juicio final, todo lo que hagamos en esta vida es para lograr que al venir Jesús por nosotros estemos contados entre los que estarán con Él en el paraíso.

IV. Oración

La tierra, Señor, se alegra en estos días, y tu Iglesia desborda de gozo ante tu Hijo, el Señor, que se avecina como luz esplendorosa, para iluminar a los que yacemos en las tinieblas de la ignorancia, del dolor y del pecado.

Lleno de esperanza en su venida, tu pueblo ha preparado esta corona con ramos del bosque y la ha adornado con luces.

Ahora, pues, que vamos a empezar el tiempo de preparación para la venida de tu Hijo, te pedimos, Señor, que, mientras se acrecienta cada día el esplendor de esta corona, con nuevas luces, a nosotros nos ilumines con el esplendor de aquel que, por ser la luz del mundo, iluminará todas las oscuridades.

Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.

V. Compromiso

Reflexión

  • ¿Qué acciones vas a realizar para prepararte en este Adviento?
  • ¿Cómo vas a compartir la alegría de la venida de Jesús con los demás?

Acción: 

  • Busca un calendario de Adviento como el anexo y síguelo en Familia

Publicado por Juan Carlos Carrillo

Juan Carlos Carrillo es un predicador Católico. Ha trabajado para distintos movimientos religiosos, como el Regnum Christi, Familia Educadora en la Fe, la Arquidiócesis de Tlalnepantla, entre otros. Juan Carlos inicio su formación religiosa en Familia Educadora en la Fe desde los 3 años. A los 13 años se convirtió en animador de grupos juveniles. A los 19 años entro al movimiento Regnum Christi donde se encargo en durante varios años de los Círculos de Estudios, Horas Eucarísticas y Retiros. A los 24 años se convirtió en el Vice-Coordinador Nacional de Universitarios del Movimiento Familia Educadora en la Fe y a los 27 tomo la responsabilidad como Coordinador Nacional de Juveniles del mismo movimiento. Juan Carlos se dedica a dar charlas, conferencias y catecismo a jóvenes y adultos buscando que encuentren el amor de Dios en sus vidas.

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