Recuerdo al estar en los últimos años de la Preparatoria, que llevábamos una clase que se llamaba Orientación Vocacional, la verdad es que fue muy buena, muchos test, mucha guia, mucho entendimiento de las carreras profesionales, de las universidades, pero ¿qué creen? eso no es la vocación, eso es la elección de una carrera.
El grupo de 4 círculos que muestro arriba, es una visión de lo que el mundo ve sobre la vocación, la profesión, la misión, y la pasión, solo que le falta un componente: el Plan de Dios.
No debemos olvidar que el ser humano es un ser integral, es decir al menos debe formarse en 4 aspectos:
- Su cuerpo
- Su Mente
- Su Sociedad
- Su Espíritu
El error de aquellas clases de Orientación Vocacional es que únicamente se enfocaban en la mente, olvidando, la parte física, social y espiritual.
La vocación del Cristiano, tiene 3 componentes fundamentales
- Características físicas, mentales, sociales, y espirituales
- Un llamada de Dios a cumplir su plan
- Una respuesta humana
En las primeras 2, nosotros no tenemos nada que hacer, es decir, no elegí mi color de ojos, ni mi inteligencia, ni la familia o ciudad donde nací, o la Fe con la que Dios me formó, tampoco elegimos cuándo, para qué o de qué forma Dios nos quiere usar, vean la vida de grandes Santos, ellos tenía un plan, Dios les pide que vayan por otro camino, pueden ver el caso San Ignacio de Loyola (quería ser militar), San Francisco (Músico y/o Vendedor), San Agustín (El pudo ser lo que hubiera querido), o San Juan Pablo II (Actor).
¿Qué queda de nuestro lado? El si o el no.
El texto de Marcos 10: 17-22 es un gran ejemplo de la vocación, un joven que a) tiene las características para ser apóstol de Cristo, b) Una llamada de Dios a que lo siga, más cuando llega la respuesta c) El responde No.
Cuando tengamos duda de la vocación que Dios nos da (porque da miedo ver lo que Dios quiere de nosotros) regresa al texto de Jeremías 1:6-8
Entonces dije: «¡Ah, Señor Dios!
No sé hablar,
Porque soy joven».
Pero el Señor me dijo:
«No digas: “Soy joven”,
Porque adondequiera que te envíe, irás,
Y todo lo que te mande, dirás.
No tengas temor ante ellos,
Porque contigo estoy para librarte», declara el Señor.
¿Estas listo para cumplir la vocación que Dios tiene preparada para ti, desde la eternidad?
La verdad esto es muy bueno para nosotros que seguimos las cosas buenas de Dios
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